El viajero

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‏‏‏‏بسم الله الرحمن الرحيم

Ese largo viaje y sus hermosas lecciones para el creyente; cuando mira a su alrededor, esas montañas gigantes y la gente como hormigas a su lado, esas piedras, árboles, hierbas, arena, flores, insectos de los cuales Allah está al tanto de todos y cada uno de ellos, con todo esto, el musulmán, se da cuanta de la grandeza de Allah, pues Allah ciertamente lo abarca todo y está al tanto de todo cuanto existe ¿acaso esto nos es motivo para caer humillados ante el Todo Poderoso, el Misericordioso? Al darnos cuenta de todos estos signos, deberíamos estar avergonzados, arrepentendios por desobedecerLe y ser negligentes con sus mandatos e inmensamente agradecidos por las numerosas bendiciones que nos ha dado. Con todos estos signos deberían ablandar nuestros corazones y hacernos mejores personas. ¿Y qué decir del cansancio que uno siente durante el viaje? Uno se da cuenta de lo mucho que está necesitado de Allah (alabado Sea), pues ese grande agotamiento que sentimos nos enseña lo débiles e insignificantes que somos mientras que Allah creó la creación sin dificultades, nosotros simplemente por viajar unos km de distancia nos cansamos, unos km que ante Allah no son nada... realmente necesitamos apresurarnos a volver a Allah lo antes posible y cesar de pecar, necesitamos su Rahma (misericordia) urgentemente y ese agotamiento del viaje debería ser una de las causas de nuestra tawba (arrepentimiento).

Shaikh Al Islam Ibn Taymiyyah –Allah le tenga misericordia- dijo:

“Sabe que la necesidad que siente el siervo para con su Señor implica que él le adore y no le asocie nada ni nadie, Él no tiene semejanza para que se le pudiese comparar. No obstante, esta necesidad reúne bajo algunos aspectos la necesidad que tiene el cuerpo de comer y de beber, aunque entre estos dos estados hayan muchísimas diferencias. El siervo, en realidad lo es mediante su corazón y su alma y éste no tiene valor sino por su Dios, Allah, no hay más divinidad que Él. Ella no encuentra el apaciguamiento en este mundo salvo con el recuerdo de Allah. Y aunque el siervo encontrara el placer y la alegría en otro que Allah, no durarían. Al contrario, ello varia de un tipo a otro y de una persona a otra, en cuanto a su Dios, el siervo tiene una necesidad constante, en toda situación y dondequiera que esté, Allah está con él”.


Majmu’ al Fatawa, t.1, p.24
El dogma del monoteísmo, p.68,
Shaikh Al Fawzan
Extraído de: alhouda.forumactif.com
Traducido por Ummu Khattab Al Andalusiyyah para: atharusalaf.com

— Halauat al Iman (halauat-al-iman.blogspot.com.es)

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